Rendir tus planes a la sabiduría de Dios antes de dormir

¿Te cuesta desconectar de tus planes y metas cuando llega la noche?

A veces, la mente no para de dar vueltas, repasando lo que queremos lograr.

Pero, ¿y si el secreto para descansar mejor fuera soltar el control y confiar en que Dios tiene

una perspectiva más sabia y completa que la nuestra?

Rendir tus planes a Dios no significa renunciar a tus sueños, sino reconocer que no todo depende de

ti.

Al entregar tus preocupaciones y metas antes de dormir, permites que la sabiduría divina te guíe incluso mientras

descansas.

Es un acto de humildad y confianza que puede aliviar la ansiedad y abrirte a nuevas posibilidades.

Imagina que cada noche, al cerrar los ojos, visualizas tus planes flotando suavemente hacia las manos de Dios.

Este sencillo gesto mental puede ayudarte a soltar el peso de la autoexigencia y a encontrar paz.

Dejar que Dios tome el timón mientras duermes es confiar en que su sabiduría puede sorprenderte al despertar.

La próxima vez que te acuestes, prueba a rendir tus planes y preocupaciones a Dios.

Hazlo con sinceridad, sin miedo a perder el control.

Descubrirás que la verdadera paz nocturna llega cuando confías en que hay una sabiduría mayor guiando tu camino,

incluso mientras duermes.

¿Te atreves a intentarlo esta noche?