Oración para enfrentar los miedos nocturnos con fe

Señor, cuando la noche cae y el silencio pesa, me acerco a Ti con el alma abierta.

No vengo con palabras bonitas, sino con el corazón en la mano.

Dame la gracia de no temer a lo que no veo, de confiar en que Tú velas por

mí incluso cuando todo parece incierto.

Padre bueno, a veces la oscuridad me habla con voces que no entiendo.

Me susurra dudas, me recuerda heridas.

Pero yo te hablo a Ti, con la voz temblorosa pero sincera.

Regálame tu paz, esa que no se explica, pero que se siente como un abrazo que me envuelve

y me sostiene.

Jesús, amigo fiel, en esta noche te necesito más que nunca.

No quiero esconder mis miedos, quiero entregártelos.

Que tu presencia me acompañe como un susurro suave en medio del silencio.

Que tu amor me cubra como una manta tibia que me recuerda que no estoy solo, ni siquiera

en la oscuridad.

Espíritu Santo, quédate conmigo esta noche.

Que tu luz me guíe incluso con los ojos cerrados.

Que tu consuelo me alcance cuando el sueño se resista.

Gracias por escucharme sin juicios, por estar sin condiciones.

Me despido con el alma más liviana, fortalecido por tu amor y fortaleciendo tu Fe.