Xochitécatl: la pirámide astronómica de Tlaxcala que desafía la historia

¿Sabías que en Tlaxcala existe una pirámide olvidada en Nativitas que funcionaba como observatorio astronómico?

Xochitécatl, construida hace más de 2,500 años, no solo es una joya arqueológica, sino una ventana al conocimiento

celeste de los pueblos prehispánicos.

Su ubicación y alineación revelan una comprensión del solsticio y los ciclos lunares que aún sorprende a los

expertos.

La Gran Basamento de Xochitécatl no es una pirámide común.

Su forma elíptica y su orientación hacia el volcán La Malinche indican que fue diseñada para observar fenómenos

celestes.

Durante los equinoccios, la luz solar atraviesa puntos específicos del templo, marcando fechas clave para la agricultura y

los rituales.

Era un calendario viviente tallado en piedra.

Los arqueólogos han encontrado figurillas femeninas y restos de rituales en Xochitécatl, lo que sugiere que también fue

un centro de culto a la fertilidad.

La conexión entre astronomía y fertilidad no era casual: los ciclos celestes guiaban la siembra y la cosecha.

El cielo dictaba la vida, y Xochitécatl era el puente entre ambos mundos.

Hoy, Xochitécatl sigue siendo un lugar de poder.

Este sitio no solo guarda piedras antiguas, sino también el legado de una civilización que miraba al cielo

para entender su lugar en la Tierra.

Xochitécatl aún tiene mucho que contar. ¿Y tú, que más sabes de Xochitécatl? Déjanos saber tus comentarios y síguenos en

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