Oración para sanar una traición sin endurecer el corazón

Cuando alguien nos traiciona, el alma se rompe en mil pedazos. Esta oración nace desde lo más profundo del corazón, hablándole al Señor con humildad, buscando consuelo, sanación y la fuerza para no dejar que el dolor nos endurezca. Si has sido herido, acompáñame en esta plegaria sincera, donde pedimos a Dios que nos devuelva la paz sin perder la ternura del alma.

601views
33likes
1comments

Create Your Own

Make AI-powered videos in minutes

Video Transcript

Full text from the video

0:00

Señor mío, hoy vengo ante Ti con el alma herida.

0:04

Me cuesta entender cómo alguien en quien confiaba pudo traicionarme.

0:08

No vengo a pedir venganza, ni justicia humana, sino que me ayudes a no perder la fe en

0:14

el amor.

0:15

Te ruego, Dios bueno, que no permitas que esta herida me convierta en alguien frío.

0:21

Sostén mi corazón, que tiembla entre el dolor y la decepción.

0:25

Padre amado, me cuesta respirar entre tanto dolor.

0:30

Siento que algo dentro de mí se ha roto.

0:33

Pero no quiero que esta herida me robe la capacidad de amar.

0:37

Te suplico que pongas bálsamo en mi alma, que me enseñes a perdonar sin olvidar quién soy.

0:44

No quiero endurecerme, Señor, ni levantar muros.

0:48

Solo deseo sanar sin perder la luz que Tú pusiste en mí.

0:52

Dios de misericordia, Tú que conoces cada rincón de mi corazón, sabes cuánto me duele esta traición.

0:59

No quiero vivir con rencor, ni dejar que el resentimiento me consuma.

1:03

Ayúdame a soltar lo que no puedo cambiar, a confiar en que Tú harás justicia a Tu manera.

1:09

Enséñame a mirar con compasión, incluso a quien me hirió, sin dejar de cuidarme a mí mismo.

1:15

Jesús, amigo fiel, Tú también fuiste traicionado.

1:20

Tú sabes lo que es ser herido por alguien cercano.

1:23

Por eso, me acerco a Ti con confianza, sabiendo que me entiendes.

1:27

Dame Tu paz, esa que no depende de las circunstancias.

1:31

Que mi corazón no se endurezca, que no me vuelva desconfiado.

1:36

Ayúdame a seguir creyendo en la bondad, aunque hoy me cueste tanto verla.

1:40

Espíritu Santo, consuelo del alma, ven y habita en este corazón roto.

1:46

No quiero que el dolor me defina.

1:48

Quiero aprender de esta herida sin convertirme en alguien amargado.

1:53

Enséñame a poner límites sin perder la ternura.

1:56

A confiar de nuevo, sin ingenuidad, pero con esperanza.

2:00

Que esta traición no sea mi final, sino el inicio de una sanación profunda contigo a mi lado.

2:07

Señor, no quiero negar lo que siento.

2:09

Me duele, me enoja, me confunde.

2:13

Pero en medio de todo esto, elijo hablarte con sinceridad.

2:17

No tengo todas las respuestas, pero tengo fe en que Tú puedes transformar este dolor en algo bueno.

2:23

Ayúdame a no cerrarme, a no dejar que el miedo me gobierne.

2:27

Que mi corazón siga siendo tierra fértil para el amor.

2:31

Gracias, Señor, por escucharme.

2:33

Aunque no todo está resuelto, siento que me has sostenido en esta oración.

2:38

Te entrego esta herida, confiando en que Tú sabrás qué hacer con ella.

2:43

No quiero endurecerme, quiero sanar.

2:45

Ayúdame a seguir adelante con un corazón libre, sin cadenas de rencor.

2:50

Que el amor que viene de Ti me renueve cada día.

2:53

Amén.