Oración para Empezar una Nueva Etapa con Fe y Valentía
Comenzar algo nuevo puede dar miedo, pero también es una oportunidad para crecer. Esta oración es una conversación sincera con Dios, pidiéndole guía, valor y un corazón obediente. Si estás por iniciar un nuevo camino, tómate un momento para orar con humildad y confianza. Que estas palabras te ayuden a conectar con Él y a caminar con firmeza hacia lo que viene.
Create Your Own
Make AI-powered videos in minutes
Video Transcript
Full text from the video
Señor mío, aquí estoy, al borde de algo nuevo.
No sé exactamente qué me espera, pero sí sé que no quiero caminar sin Ti.
Te pido, con todo mi ser, que me tomes de la mano y me muestres el camino.
No quiero avanzar por impulso ni por miedo, sino por fe.
Guíame, Padre, que Tu luz sea mi faro en esta nueva etapa que comienza.
Dios de mi vida, necesito valentía.
A veces el corazón tiembla y la mente se llena de dudas.
Pero Tú, que conoces cada rincón de mi alma, sabes cuánto deseo seguirte.
Dame el coraje para dar pasos firmes, incluso cuando no vea el final del camino.
Que no me paralice el miedo, sino que me impulse la confianza en que Tú vas delante de
mí.
Padre bueno, enséñame a escuchar Tu voz.
En medio del ruido del mundo, quiero aprender a reconocer Tu susurro.
Que no me guíen mis emociones ni las opiniones ajenas, sino Tu verdad.
Si me hablas en lo pequeño, que no lo pase por alto.
Si me corriges, que no me ofenda.
Quiero ser sensible a Tu dirección, incluso cuando no sea lo que esperaba.
Señor, dame un corazón dispuesto.
No quiero seguirte solo cuando me conviene, sino también cuando cuesta.
Ayúdame a obedecer incluso cuando no entiendo, a confiar cuando todo parece incierto.
Que mi fe no dependa de las circunstancias, sino de Tu fidelidad.
Hazme humilde para aceptar Tu voluntad, y valiente para vivirla.
Que mi vida sea una respuesta sincera a Tu amor constante.
Jesús, Tú que conoces el peso de los comienzos, acompáñame en este nuevo tramo.
No quiero correr sin sentido ni quedarme estancado por temor.
Enséñame a avanzar con propósito, a vivir con intención.
Que cada paso esté alineado con lo que Tú sueñas para mí.
Si tropiezo, levántame.
Si me pierdo, búscame.
Pero sobre todo, quédate conmigo en cada momento del camino.
Espíritu Santo, sé mi fuerza cuando flaquee.
Tú que das vida a lo seco, renueva mi interior.
Si me falta entusiasmo, enciende mi pasión.
Si me invade la rutina, despierta mi alma.
No quiero vivir por inercia, sino con propósito.
Sopla sobre mí, lléname de Tu presencia.
Que esta nueva etapa no sea solo un cambio externo, sino una transformación profunda desde dentro.
Gracias, Señor, por escucharme.
No sé qué traerá esta nueva etapa, pero sí sé que no la viviré solo.
Me aferro a Tu promesa de estar conmigo siempre.
Que cada día sea una oportunidad para conocerte más, para amarte mejor, para servirte con alegría.
Aquí estoy, dispuesto, confiado, esperanzado.
Que se haga Tu voluntad en mí.
Amén.